Thursday, September 13, 2007
Fragmento de la carta aquella...
No sé.
Que si sí, que si no.
Que mañana estoy bien, pero hoy no.
Que no puedo escribir ni reir ni gritar, ni puedo tener orgasmos. Que no soy yo, pero tampoco soy otra.
Que han sido días raros, con tardes bermellón y que en medio de mi incomodidad quiero encontrar la bala perdida, las tablas rompiendo mi cuello, el cubo de pintura quebrando mi cabeza, el autobús arrollando mi bofo cuerpo y, veo de frente al payaso de rasgos exagerados burlándose de la situación, de los intentos de autodestrucción que nunca son suficientes para propiciarme un fin y un agente externo es el que llega a aniquilarme.
No sé.
Que mañana estaré bien, pero definitivamente, hoy no quiero estarlo.
Que si sí, que si no.
Que mañana estoy bien, pero hoy no.
Que no puedo escribir ni reir ni gritar, ni puedo tener orgasmos. Que no soy yo, pero tampoco soy otra.
Que han sido días raros, con tardes bermellón y que en medio de mi incomodidad quiero encontrar la bala perdida, las tablas rompiendo mi cuello, el cubo de pintura quebrando mi cabeza, el autobús arrollando mi bofo cuerpo y, veo de frente al payaso de rasgos exagerados burlándose de la situación, de los intentos de autodestrucción que nunca son suficientes para propiciarme un fin y un agente externo es el que llega a aniquilarme.
No sé.
Que mañana estaré bien, pero definitivamente, hoy no quiero estarlo.
Monday, September 10, 2007
Retorno
Y te veré venir entre la multitud.
Blancura exagerada y porcelana. Cámara lenta. Obsidiana móvil naciendo de tu cabeza, acariciando tu cuello y revolviéndose en tu cara. Lentes obscuros, casi dantescos. Un blur magenta en medio de cada mejilla y una bolsa gigantesca... Sólo tú sabrás qué cargas en ella.
Serás tú. Te reconoceré aunque tengas la piel ajada y tu cuerpo sea una poesía hecha jirones. Aunque los des-carados consideren que los pedacitos de tí que quedaron esparcidos en el aire ya no te completan, sabré que eres mayo y noviembre. Eres quien no necesita los ojos del rostro para ver y mucho menos ese órgano de músculos estriados que tienes en la boca para hablar.
Espero verte de frente y que el tiempo se suspenda eternamente. Sigur Rós sonando en mi cabeza. Un café y un cigarro en la mano izquierda para tí; para mí, agua mineral. Puedo adivinar que habrá silencio.
... You are the sounds i wanna take home and the poetry i will repeat eternally.
Body art no planeado. Una instalación de luces, hilos y sonidos reflejándose en las paredes del árbol del jardín... That's what you are my dear.
...
Blancura exagerada y porcelana. Cámara lenta. Obsidiana móvil naciendo de tu cabeza, acariciando tu cuello y revolviéndose en tu cara. Lentes obscuros, casi dantescos. Un blur magenta en medio de cada mejilla y una bolsa gigantesca... Sólo tú sabrás qué cargas en ella.
Serás tú. Te reconoceré aunque tengas la piel ajada y tu cuerpo sea una poesía hecha jirones. Aunque los des-carados consideren que los pedacitos de tí que quedaron esparcidos en el aire ya no te completan, sabré que eres mayo y noviembre. Eres quien no necesita los ojos del rostro para ver y mucho menos ese órgano de músculos estriados que tienes en la boca para hablar.
Espero verte de frente y que el tiempo se suspenda eternamente. Sigur Rós sonando en mi cabeza. Un café y un cigarro en la mano izquierda para tí; para mí, agua mineral. Puedo adivinar que habrá silencio.
... You are the sounds i wanna take home and the poetry i will repeat eternally.
Body art no planeado. Una instalación de luces, hilos y sonidos reflejándose en las paredes del árbol del jardín... That's what you are my dear.
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